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“Parecen
totalmente depravados, corruptos, viles
y odiosos; pero es muy raro que aquellos
que hayan llegado tan bajo no hayan sido
degradados en el proceso, además, llega
un punto en que los desafortunados y los
infames son agrupados, fusionados en un
único mundo fatídico. Ellos son los
miserables..." Víctor Hugo 1862. |
Los miserables |
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El Grupo de Lima,
un invento amorfo,
sin credibilidad ni
raíces, es el
pelotón de
caballería que
sustituye a la
inútil OEA de Luis
Almagro, el soldado
de plomo uruguayo
que la desvergüenza
derrite. |
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La
cruzada derechista
contra Venezuela es
al descampado y sin
tapujos, igual que
la que se practica
en Brasil contra
Luiz Inácio Lula da
Silva. El Grupo de
Lima, un invento
amorfo, sin
credibilidad ni
raíces, es el
pelotón de
caballería que
sustituye a la
inútil OEA de Luis
Almagro, el soldado
de plomo uruguayo
que la desvergüenza
derrite.
Integrado por
Argentina, Brasil,
Canadá, Chile,
Colombia, Costa
Rica, Guatemala,
México, Paraguay,
Perú y Panamá,
muchos de sus
gobernantes han
pactado con el
diablo para tratar
de impedir una
restauración en
aquellos países
donde los gobiernos
progresistas han
retrocedido, y
derribar a los que
aún se mantienen en
pie, como es el caso
de Venezuela.
Son los juramentados
contra la asistencia
del presidente
Nicolás Maduro a la
mal llamada cumbre
de las américas que
se realizará en Lima
este mes; los que
atacan a Lula y se
confabulan contra
todo lo que se
interponga a su
modelo económico y
social neoliberal en
franca bancarrota;
los viles que nunca
faltan.
El grupo respaldó a
Panamá luego de que
el presidente Juan
Carlos Varela,
personero de lo más
retrógrado del Opus
Dei, incluyera a
Maduro y otros
dirigentes
venezolanos en una
lista de alto riesgo
por blanqueo de
capitales, sin
presentar la más
mínima prueba.
Es ridícula esa
acusación cuando
Panamá, por mucho
que trate de negarlo
Varela, es
lamentablemente el
más predilecto
paraíso fiscal donde
presidentes como
Mauricio Macri han
buscado refugio para
proteger sus dineros
de dudoso origen
como antiguamente
hacían los piratas
en lejanas islas
donde escondían sus
tesoros.
Y cuando en
respuesta al
exabrupto de Varela
de sancionar al
gobierno venezolano
y poner al
presidente Maduro en
una arbitraria lista
de apestados como si
se tratase de un
delincuente, el
mandatario
bolivariano rompe
relaciones
económicas con 22
ejecutivos y 46
empresas panameñas
por irregularidades,
el Grupo de Lima se
rasga las
vestiduras, condena
a Caracas y lo acusa
de quebrar el orden
constitucional.
El grupo
-paradójicamente
creado en el país
con más presidentes
corruptos en
sucesión imparable-
llega al cinismo de
llamar al gobierno
venezolano a
comprometerse en la
búsqueda de una
solución a la crisis
política, económica,
social y humanitaria
que afecta a la
nación sin siquiera
mencionar a los
verdaderos culpables
de esa situación: la
contrarrevolución
interna y el
gobierno de Estados
Unidos que le
imponen una guerra
económica.
En cambio, guardan
silencio cómplice
con lo que ocurre en
Brasil con Lula
donde gobierna el
golpista Michel
Temer, uno de los
miembros del Grupo
de Lima, ni acusarlo
de violar todos los
días y a todas horas
el orden
constitucional, ni
de usurpar la
presidencia
arrebatada a Dilma
Rousseff, o en
Honduras ante el
descarado golpe
electoral de Juan
Orlando Hernández.
En el Grupo de Lima
“la luz del día se
funde con la sombra
y la oscuridad entra
en sus corazones; y
en medio de esta
oscuridad el hombre
se aprovecha de la
debilidad de las
mujeres y los niños
y los fuerza a la
ignominia. Luego de
esto cabe todo el
horror. La
desesperación
encerrada entre unas
endebles paredes da
cabida al vicio y al
crimen..."
“Parecen totalmente
depravados,
corruptos, viles y
odiosos; pero es muy
raro que aquellos
que hayan llegado
tan bajo no hayan
sido degradados en
el proceso, además,
llega un punto en
que los
desafortunados y los
infames son
agrupados,
fusionados en un
único mundo
fatídico. Ellos son
los miserables..."
Eso lo dijo Víctor
Hugo en 1862, aunque
parezca que fue hoy
en Brasilia, Lima o
Panamá.
https://www.alainet.org/es/articulo/192144
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